Aquí están los resultados de los primeros análisis de agua realizados en el río Cabra. El primero corresponde al que realizaron los alumnos del IES Felipe Solís en el nacimiento del río y el segundo lo realizó Náyade del Sur río abajo.

En las dos zonas el contenido de fosfato y de nitrato es tan bajo que no podemos detectarlo con exactitud con nuestros métodos, lo que es una buena noticia. Los niveles altos de estos dos compuestos indican contaminación y eutrofización. Esto se traduciría en una mala calidad del hábitat acuático, ya que sería difícil la vida en él.

El pH es claramente básico, como los alumnos muy bien dedujeron, esto probablemente se deba a la naturaleza de la roca caliza, por la cual se filtra el agua en las montañas para finalmente emerger como aguas superficiales formando el río Cabra.

La conductividad eléctrica está relacionada con los sólidos disueltos en el agua. Ambas son mayores río abajo. Esto quiere decir que hay mayores partículas en suspensión una vez salimos del entorno urbano, esto es que el agua está algo más turbia, lo que no es una buena señal.

En el muestreo de macroinvertebrados los alumnos encontraron zapateros y larvas de mosquito. ¿Qué encontraremos en muestreo y análisis final?